09 Abr La reputación es un valor
Tomamos conciencia de la reputación cuando hay una situación de crisis, o cuando toca vender la empresa, por ejemplo. Su importancia es cada vez más estimada como uno de sus valores en sí mismo. Cuantificable incluso en resultados económicos.
La reputación es lo que se dice y publica de la empresa, la opinión generalizada que se forma como consecuencia de la expresión de los valores, transmitidos a través de sus múltiples actuaciones. Aún cuando su realidad es la de un bien intangible, sin embargo su expresión es real en los resultados del balance.
Tiempo atrás, la imagen o comunicación era considerada un gasto improductivo. Algo a lo que había que acceder para darse a conocer a través de la publicidad y las relaciones públicas ante personas y empresas relacionadas con nuestra organización. Este concepto ha virado radicalmente. Se distingue entre imagen y reputación. La imagen son aquellos signos y mensajes que proyecta la empresa para darse a conocer a través de su marca, sus medios digitales , redes, cultura corporativa, el producto mismo. La reputación es el resultado de todas estas acciones y el concepto que genera en la opinión de sus públicos, tanto internos como externos.
La difusión de internet y los medios digitales ha potenciado la capacidad de las marcas de darse a conocer en cortos períodos de tiempo e incluso a bajo coste. Pero también se convierte en un riesgo real pues salir y darse a conocer, realidad imprescindible para difundir nuestros productos y servicios, implica estar expuestos no tanto al juicio colectivo, sino al hecho inevitable de ser visto de una determinada manera. Una característica de los nuevos medios es la capacidad de réplica instantánea, por lo que dicha opinión puede variar en cuestión de segundos.
Una empresa necesita construir cuidadosamente como quiere que se le conozca, los valores que desea transmitir y una manera de abordar el conflicto cuando surja la amenaza a su reputación. No es un maquillaje, es la expresión de su propia cultura empresarial. Hay empresas cuya misión es dar seguridad, para otras es brindar felicidad, o apoyar en momentos difíciles, dar oportunidades laborales, hay muchos tipos de misión. Y dicha misión se manifiesta a través de unos valores que pueden variar independientemente de la misión de la empresa.
Habrá empresas cuya misión sea dar felicidad a través de objetos de lujo y otra puede hacerlo desde una marca de economía colaborativa.
Creemos que las nuevas políticas de transparencia y responsabilidad empresarial son importantes, y serán verosímiles en la medida que se manifiesten en todas los aspectos de la filosofía empresarial. Y este bien será, cada vez más, cuantificable. (ECM)