04 Ago 4 Medidas + 1 para autónomos
Crecer será un desafío que necesitará una cuidadosa gestión de los tramos de cotización para los autónomos con el nuevo RETA.. La falta de cultura financiera y de gestión es un handicap importante para lograr un crecimiento en el que el control de los costes y el margen se mantengan bien gestionados.
Será necesario un más exigente seguimiento de los números para alcanzar la supervivencia de la actividad.
En la nueva norma dictada por el actual Ejecutivo español para imponer el nuevo régimen de cotizaciones, el Real Decreto-ley 13/2022, del 26 de julio 2022, se sigue abarcando en un mismo marco regulatorio a todos los autónomos, sin diferenciar a los societarios de los no societarios, si son profesionales o tienen actividad empresarial o comercial. Ni siquiera se diferencian las peculiaridades de cada autonomía.
Dada la rapidez en que se ha desencadenado la resolución, no se han defendido gastos necesarios para la actividad y que ahora no son deducibles.
Las nuevas normas
La gestión del autónomo se hará más exigente aún con las nuevas escalas del Régimen Especial de Trabajadores Autónomos, RETA, aprobadas in extremis por el Real Decreto y no por un debate en el Congreso, con todo el trámite parlamentario de consultas que ello permite.
Una norma que tiene efecto sobre más de 3 millones de personas y que termina afectando al 58% de la población relacionada con los autónomos de forma directa o indirecta, merece un tratamiento cuidadoso.
Un ejemplo de la imprecisión de esta norma, es que habrá seis posibilidades de cambio de cuotas al año. Ello obligará a la contratación de un asesor que permita evaluar cuándo y cómo hacer dichos cambios.
¿Por qué no se escogió un criterio de caja única? De esta forma se podría ingresar en la Seguridad Social en la fecha en que el autónomo tenga tesorería (sin sanciones). Esta sería una forma mucho más útil de facilitar la actividad.
Esta subida supondrá, pues, un incremento en los gastos de los autónomos. La norma se adapta a Europa, pero solamente en tomar como base de cotización los ingresos reales de cada autónomo. No en otras ventajas o consideraciones aplicadas en países europeos.
Medidas de gestión fundamentales
El análisis de esta situación es mucho más profunda, afirma nuestro consultor David Martínez Alonso, en su condición de Vicepresidente de APE Galicia y como Presidente de la Asociación de Profesionales y Autónomos, AEPA de la CEO Ourense.
Algunos de sus apuntes están recogidos en el artículo de opinión del medio digital Economía en Galicia, “Una patada hacia adelante”. Más allá del análisis exhaustivo pendiente de esta norma, proponemos cuatro medidas que todos los emprendedores acogidos a este régimen debemos llevar a cabo para poder gestionar el crecimiento al que todos aspiramos. No solo para beneficio propio, sino para lograr mantener la actividad y contribuir a la producción del país.
4 medidas + 1
- 1. Controlar la tesorería diaria.
Hacer cierres mensuales para costes y margen cada mes. El control minucioso permitirá aprovechar todas las oportunidades. - 2. Hacer previsiones para el año.
Sobre los ingresos netos del año anterior, hacer previsiones del año en curso y, si es necesario, ajustar la cuota. Esto supondrá estar alertas ante los ajustes que haga la Tesorería Nacional para hacer los cambios correspondientes.
- 3. Documentación cuidadosa de la contabilidad
Tenemos que identificar aquellos gastos necesarios para la actividad y registrarlos contablemente con el máximo rigor y adecuadamente documentados. - 4. Hacer análisis comparativos de los presupuestos y ajustarlos a la realidad.
Hay que recordar que la contabilidad no es un requisito para la presentación de los impuestos sino una poderosa herramienta de análisis y seguimiento de la actividad. En definitiva, debe ser usada adecuadamente como herramienta de análisis. - 5. Sacar tiempo para trabajar (modo sorna).
Es evidente que en medio de toda la vigilancia que tendremos que hacer para mantener a raya los costes e intentar alcanzar un margen que nos permita avanzar y crecer, habrá que sacar tiempo para trabajar. Esto implica asignar también un tiempo a la semana, por ejemplo, los viernes por la tarde para dejar en orden facturas, contabilidad semanal, estimaciones, cuentas bancarias, etc.
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