25 Feb Digitalizar no es usar nuevas herramientas
Hoy no es posible observar prácticamente nada sin pasar por el lenguaje digital. Un año de pandemia ha sido suficiente para una acelerada digitalización de nuestras vidas. La fuerza del teletrabajo y la necesidad de responder con rapidez a las nuevas necesidades del mercado lo promueven.
Lo que se venía anunciando con persistencia machacona desde hace muchos años, se hizo realidad en un año de pandemia: hoy podemos decir que somos una sociedad que funciona con un nuevo lenguaje. No entender este nuevo lenguaje es estar simplemente fuera del mercado.
Desde el punto de vista de la empresa, las respuestas a cómo desarrollar este proceso no son las primeras que nos vienen a la cabeza. No solo se trata de tecnología, también de todo el proceso de gestión innovadora, dirección y liderazgo. Incluyendo un nuevo autoliderazgo.
La primera pregunta que hay que hacerse es: ¿Para qué quiero digitalizar? ¿Qué solución voy a obtener y qué es lo que quiero resolver?
¿Qué digitalizo?
- 1. Hay dos fuentes de base que aportan necesidades en el proceso de digitalización: el cliente tiene que estar siempre en el centro del proceso, pues actuamos para responder a sus necesidades. Y los recursos humanos. En ellos está la principal fuente de información y de conocimiento para determinar las necesidades de la empresa en este cambio necesario.
- 2. La información que fluye desde esta base es la materia con la que la dirección se tiene que involucrar participando intensamente del proyecto de innovación, respuesta y toma de decisiones. Le corresponde liderar el proceso.
- 3. ¿Cómo lo voy a hacer? Para implantar la digitalización necesitamos aplicar unos nuevos procesos.
- 4. Implantar herramientas de control para monitorizar el proceso. Es imprescindible poder medir el grado de avance y la evaluación de los resultados obtenidos conocer los resultados y aplicar las modificaciones que procedan.
- 5. El proceso no implica solo aspectos tecnológicos, se innova desde la misión de la empresa, la adaptación en el modelo de negocio y los nuevos procesos.
- 6. Es el momento de analizar y estudiar las herramientas digitales existentes. Otras veces son las nuevas herramientas las que producen los cambios dentro de la empresa. La clave está en aplicar e invertir en aquellas que nos ayuden a resolver los problemas. Aquellas que nos permitan obtener las soluciones que requieren los clientes.
- 7. No podemos olvidar que ahora hay que hibridar tanto el online como el offline. Los seres humanos son necesarios para todos aquellos procesos que no pueden hacer las máquinas. Siguen siendo necesarias la creatividad y la toma de decisiones. Por otro lado, todo acaba en un proceso donde es necesaria una persona.
Colaboración y cultura empresarial
Los procesos de digitalización en las empresas o en el desarrollo de los emprendimientos de profesionales autónomas (incluso con más razón) hacen indispensable un cambio en la cultura empresarial. De la verticalidad y las estructuras de autoridad, pasamos a un funcionamiento más horizontal, líquido, permeable.
Se trata de dar salida a todas las aportaciones de toda la cadena de valor que compone la red de personas y recursos de cada emprendimiento.
En un proceso de digitalización híbrido, que tiene en cuenta el factor humano, habrá que considerar a todos los actores que forman parte de la empresa. El funcionamiento de colaboración acelera procesos incorporando incluso a otros agentes.
Estrategia empresarial y transformación
La mentalidad agile de generación de ideas y conocimiento a través de la colaboración debe dar lugar a toda una nueva cultura empresarial. En ella empleados y dirección juegan roles muy distintos a los de tiempos pasados pero siempre orientados al propósito de la empresa.
El estado de transformación es permanente. La linealidad del desarrollo de las cosas ya no forma parte de una realidad cambiante y que incluso, ha virado para tornarse completamente nueva. El fin último siempre será buscar nuevas formas de ingreso para la empresa. Sin embargo, esto no se consigue sin un monitoreo incesante del mercado poniendo al cliente como fin último, pero también, teniendo como misión el propósito de la empresa su para qué responsable ante el mundo
Digitalizar no significa nuevas herramientas
En resumen, digitalizar no consiste en comprar una herramienta digital (que no te engañen con un software/hardware). Es un proceso que requiere la transformación de la empresa en una estructura ágil, dinámica, adaptable. Con personas con una mentalidad entrenada para sucesivos procesos de cambio. Pero ese será otro tema.
